La discriminación que sufren la viudas en la India es un asunto muy poco conocido. Cuando una mujer se casa pasa a vivir con la familia de su marido, desvinculándose de su casa natal, y cuando muere su pareja es desposeída de todo y expulsada de su casa por los familiares del marido fallecido. Las viudas quedan descastadas, despojadas de cualquier propiedad, convertidas en un mal augurio que nadie quiere a su lado, y condenadas a la mendicidad de por vida. Suelen cantar en ashram (comunidades espirituales), de ciudades santas, para lograr una limosna.
Publicado en El Periódico, Gara y Ara.